La asamblea de Ecuador rechazó la despenalización del aborto por violación. Una demanda que lleva años reivindicada por los colectivos de mujeres que exigen que el aborto sea ley. Que se acabe con la penalización de las mujeres y las niñas.

Publicado en Nueva Revolución

Teresa Domínguez

La Asamblea de Ecuador rechazó la despenalización del aborto por violación.

Mujeres con pañuelos verdes (Selene Flores)

No son mujeres embarazadas, son niñas violadas. El pasado 6 de agosto, la despenalización del aborto por violación centró el debate en el Pleno de Asamblea Nacional de Ecuador el segundo debate de las reformas al Código Orgánico Integral Penal (COIP).

Una demanda que lleva años reivindicada por los colectivos de mujeres que exigen que el aborto sea ley. Que se acabe con la penalización de las mujeres y las niñas. Sin embargo, esta vez tampoco pudo ser. Y la asamblea rechazó la despenalización del aborto por violación.

Y el colectivo de mujeres que pide a gritos un derecho reconocido por altas instituciones como la Organización Mundial de la Salud, o la Organización de las Naciones Unidas, ONU, ha visto cómo su reivindicación vuelve a caer en saco roto, y pendientes del posible uso del veto del presidente del país.

Obligar a una niña a ser madre es una tortura. No podemos olvidar que el aborto inseguro es otro de los factores que contribuyen a las muertes maternas por culpa de leyes restrictivas. La Organización Mundial de la Salud estima que al menos 22.000 mujeres mueren cada año por complicaciones relacionadas con el aborto. Muchas de estas mujeres ya son madres, dejando a sus hijos huérfanos. Que 214 millones de mujeres y niñas tuviesen acceso a anticonceptivos y salud sexual, evitaría 53 millones de embarazos no deseados al año.

Tenemos que hacer hincapié en que el embarazo es la primera causa de muerte en adolescentes en países de América latina por complicaciones en la gestación y parto y que matan al año a 70.000 mujeres y niñas. Expertos de la Organización de las Naciones Unidas ( abogan por la práctica de abortos seguros para todas las mujeres y niñas que los necesiten, no solo para las que tienen recursos.

El proyecto de investigación Mapeando la criminalización del aborto en Ecuador ha contribuido a visibilizar distintas perspectivas que nos permiten comprender “el disciplinamiento de los cuerpos de las mujeres y la encarnación de las desigualdades de género, etnia y clase ante la mirada estatal, evidenciando el cuerpo como un territorio en sí mismo donde se cruzan tácticas de despojo y resistencia.“.

En Ecuador la influencia de los grupos antigénero -o antiderechos- ha sido relativamente disimulada y solo se ha visibilizado con fuerza en los últimos 4 años. Todo ello está relacionado, según el dossier que recomiendo, con los esfuerzos modernizadores y de reconstrucción de la economía con un proyecto político institucional fuerte bajo la bandera del progresismo de izquierda dejaron relativamente al margen los temas relacionados con el género y las mujeres, y el hecho de que sea estado se mantenga siempre cerca de influyentes grupos religiosos, contrarios a la ideología de género, al aborto y a muchas extensiones de derechos a la comunidad LGBTI.

La criminalización del aborto se ha intensificado en los últimos años y ha aumentado el número de mujeres detenidas que interrumpen sus embarazos: hasta la fecha (a diciembre de 2018) son 243 las mujeres judicializadas.

El aborto está penalizado en Ecuador desde su conformación como país independiente. Sin embargo, es solo durante el gobierno de la Revolución Ciudadana, a partir de los debates de las reformas del COIP en 2014, que se presentó el fenómeno de un enjuiciamiento masivo de mujeres.

Reconoce tres causales de legalidad para el aborto: para evitar riesgos en la salud, para evitar un riesgo para la vida de la mujer y cuando el embarazo es producto de violación a una mujer con discapacidad mental. El resto se tipifica como un delito. Las mujeres denunciadas son privadas de derechos fundamentales como la salud integral y el derecho a la intimidad, reconocidos también por organismos internacionales como la ONU.

«Ellas se encuentran en una situación de despojo y alienación de sus propios cuerpos que ya no es solo formal, sino de facto. Cuerpos que se vuelven exclusiva competencia estatal, territorios de conquista, relegados a meras maquinas (re)-productoras mientras las mujeres que representan son infantilizadas y victimizadas, además de perseguidas en sus prácticas de resistencia.» Dossier sobre el aborto en latinoamérica (MUY RECOMENDABLE)

El 6 de agosto, los asambleístas Sebastián Palacios, de Suma; María Mercedes Cuesta, de FE; y Wilma Andrade, de la Izquierda Democrática, fueron los que pidieron al Pleno a dar paso a la aprobación de esta propuesta. Con datos de la Fiscalía, Andrade refirió que en Ecuador entre junio 2014 y el mismo mes de 2019 un total de 26 132 niñas y mujeres fueron violadas. Eso significa, 18 violaciones por día. Además, las estadísticas registran que 3.000 niñas menores de 15 años son violadas y quedan embarazadas cada año.

Sin embargo, como decimos, la Asamblea de Ecuador rechazó la despenalización del aborto en caso de violación, mientras que El Congreso de Oaxaca aprobó por su parte la despenalización del aborto hasta las 12 semenas de gestación, dejando a las mujeres en completa libertad para decidir sobre su cuerpo. Con 24 votos a favor y 12; es la segunda entidad en hacerlo después de la Ciudad de México. Así festejó la #MareaVerdeOaxaca la despenalización del aborto.

En Oaxaca se tiene un registro de 9 mil abortos clandestinos al año y el 17 por ciento practicados por menores de 20 años, siendo el aborto la tercera causa de mortalidad materna.

Y es que como afirmó la diputada Magaly López Dominguez, «nadie está a favor del aborto sino a favor de salvar la vida de las mujeres que se ven obligadas a tomar esta medida.»

En Ecuador el aborto es legal solo cuando se encuentra en riesgo la vida o la salud de la embarazada y cuando se presenta un embarazo resultado de una violación a una mujer con discapacidad mental. Y así se mantendrá.

La mujer que cause su aborto o permita que otro se lo cause, podría ser condenada entre seis meses y dos años de prisión. Y de uno a tres años para quien la ayude. La propuesta rechazada formulaba que las mujeres pudieran acudir a la práctica del aborto en caso de violación, estupro, inseminación no consentida, mal formación del feto e incesto. 

Manifestantes protestaron tras la negativa del Legislativo ecuatoriano a despenalizar el aborto para víctimas de violación. José Jácome / EFE

Más de 20.000 niñas menores de catorce años parieron en Ecuador entre 2008 y 2018, de acuerdo con datos oficiales. Según las ONG que trabajan sobre la materia, todas fueron atendidas en el sistema de salud y la única respuesta que recibieron fue la de continuar el embarazo y su consiguiente maternalización. El 80 por ciento de los casos fueron fruto de abusos sexuales en el entorno familiar, en la escuela o en su comunidad religiosa.

«Nunca nos han regalado nada, la lucha sigue, seguiremos acompañándonos para abortar de manera segura y defendiendo a todas las mujeres criminalizadas por decidir. #AbortoPorViolación» Surkuna

El 17 de septiembre, la Asamblea Nacional introdujo la reforma del aborto a a su Código Penal, sin embargo finalmente no estuvo respaldada. No obtuvo los sufiientes votos. De 137 legisladores que componen la Asamblea, se necesitaban 70 votos para que fuera avalada la iniciativa de ampliar los supuestos para poder abortar en el país. Y solo se consiguieron 65. Ahora queda pendiente de la firma o veto del Presidente Lenín Moreno.

Surkuna, el Centro de Apoyo y Protección de los Derechos Humanos «Surkuna» ― cuyo trabajo se centra en el acompañamiento y defensa legal a mujeres criminalizadas por aborto, parto y violencia de género, así se expresó: «Nunca nos han regalado nada, la lucha sigue, seguiremos acompañándonos para abortar de manera segura y defendiendo a todas las mujeres criminalizadas por decidir. #AbortoPorViolación«

El mensaje de la asambleísta Mercedes Cuesta fue muy contundente, desde las entrañas, causó impacto, no solo en Ecuador, su mensaje traspasó fronteras, haciéndose viral en las redes sociales. Mercedes Cuesta, es sobreviviente de violación y abuso sexual en la infancia:

Sin embargo, pronto llegaron las críticas de muchos colectivos de mujeres por la incongruencia de defender vehementemente la reforma de la ley, y luego no acudir a votar. Y aunque Cuesta excusó su ausencia con una carta que publicó en redes sociales. Muchas mujeres ecuatorianas, lo consideraron una traición, ya que no fue la única que falló en su voto.

«Esa misma asambleísta que defiende con fervor su «causa» cuando le tocó votar a favor del aborto por violación se fue de vacaciones a Miami y no hizo nada, antes la admiraba ahora sé que es igual como todos los politiqueros que hay por ahí.» Kath

«La del video es una asambleísta que Instrumentalizó a su favor est lucha, porque el día de la votación se ausentó, no votó. Solo quiso protagonismo lo tuvo y parece que aún lo tiene.»

«Y no la cuestiono como sobreviviente sino por su incoherencia en su rol de asambleísta. El voto no ella no era el definitivo, otras tmbien se voltearon, pero la traición a la confianza y al respaldo que le brindó todo un movimiento es fuerte.»

«Fue todo un insulto ese comunicado. Al final ganó las ansias por la cuotita de poder. Ojo, otras también lo hicieron, se voltearon, pero lo de ella pesó tanto precisamente por ese discurso que nos llegó a muchos, pero bue… De todo esto tiene que aprender el movimiento.» Joselyn Espinosa.

«Lamento profundamente que, durante mi misión, la Asamblea Nacional haya votado por no despenalizar el aborto en casos de violación. Tal decisión, va en contra de los derechos humanos y de los principios modernos de salud pública, y expone a las niñas y mujeres más empobrecidas a embarazos precoces, abortos inseguros y a mayor mortalidad materna Dainius Pūras.

El Relator de la ONU lamentó, en un comunicado, la no despenalización de aborto por violación en Ecuador y recomendó que el Presidente ejerciera su derecho a veto. «Lamento profundamente que, durante mi misión, la Asamblea Nacional haya votado por no despenalizar el aborto en casos de violación. Tal decisión, va en contra de los derechos humanos y de los principios modernos de salud pública, y expone a las niñas y mujeres más empobrecidas a embarazos precoces, abortos inseguros y a mayor mortalidad materna. Recomiendo firmemente a las autoridades competentes que veten esta decisión y promuevan una legislación que cumpla con las normas de derechos humanos”, dijo Dainius Pūras,  Relator Especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre el derecho de toda persona al disfrute de más alto nivel posible de salud física y mental. El relator especial dejó muy claro que la violencia y la discriminación son aspectos cruciales en salud pública, destacó un aspecto misógino y racista que se desprende de los datos: en pueblos indígenas y comunidades afroecuatorianas se muestran los peores indicadores de salud que el resto de la población que vive en el país.

Por su parte, el presidente Lenín Moreno, ¿Vetará decisión sobre el aborto por violación? Tiene un mes por delante. En su mano salvar tantas vidas.

Teresa Domínguez
“No seré una mujer libre mientras siga habiendo mujeres sometidas”

PD: Agradecimiento especial a Joselyn Espinosa. por acercarnos a la realidad. #AbortoPorViolación #SeráLey #NiñasNoMadres #VetoPresidencial

Referencias: Dossier sobre el aborto en latinoamérica, Articulo el comercio, Relator de la ONU, El Universo.